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COMO CUANDO LOS MILITARES DE PINOCHET QUEMABAN LIBROS DEL CUBISMO (pensando que eran sobre la Cuba d

  • Aleksandros Drakon
  • 17 feb 2016
  • 2 Min. de lectura

De lo que he leido anoche respecto al poema Mare nostra de la Dolors Miquel,


hay cosas que no me extrañan nada y otras que me dan deseos de vomitar:


a) Que la caverna españolista, fascista y oscurantista, descalifique e insulte me hace sentir vergüenza ajena, pero poco me sorprende.


b) Que una tipeja como Pilar Rahola califique el poema Mare nostra como una "falta de respeto", solo me confirma que la opinión que tengo de ella es la correcta: una defensora de las violaciones a los derechos humanos cometidas por los Mossos que se inventa Doctorados en una "pseudo-universidad" chilena es basicamente un desperdicio de materia gris en esa cabeza inútil.


c) El "catalanismo oportunista" de ciertos misóginos mediocres me rebela. Siempre he defendido el catalanismo por su base democrática, y en democracia el fin no justifica los medios. Admiro al catalanismo justamente por lo que lo separa y diferencia del rastrero fascismo españolista. Y ciertos pelotas mediocres rastreros catalanistas están enseñando su verdadera cara. Tampoco es que se les pueda pedir cultura, son simples propagandistas. Pero al menos algo de respeto por una gran poeta catalana, que no puede ser que el catalanismo se reduzca a hacerle la pelota al líder de turno.


d) Que surjan críticos literarios espontaneos, aficionados a pareados y otras estructuras métricas del siglo pasado, me sorprende poco, donde no hay talento para el arte puede surgir un crítico facilmente.


Yo me considero un privilegiado por leer (malamente) en catalán, disfrutarlo y haber leído algunos poemas de la Misa Pagesa (Edicions 62, 2006) pero la vida es injusta y está llena de mediocres oportunistas.

Yo que no tengo ni el talento de tanto crítico literario, ni del catalanismo rastrero ni menos el de la "señora" Rahola, prefiero citar a Baudelaire:


“Todos los imbéciles de la burguesía que pronuncian las palabras inmoralidad, moralidad en el arte y demás tonterías me recuerdan a Louise Villedieu, una puta de a cinco francos, que una vez me acompañó al Louvre donde ella nunca había estado y empezó a sonrojarse y a taparse la cara. Tirándome a cada momento de la manga, me preguntaba ante las estatuas y cuadros inmortales cómo podían exhibirse públicamente semejantes indecencias".



Aleksandros Drakon va néixer en 1971. És Enginyer Comercial, Economista i Professor d'Universitat. Xilè de naixement, valencià per elecció. Actualment a l'exili económic a Santiago de Xile.


 
 
 

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